En la película de la vida
hay una breve estancia en la infancia
Amanecida en corrientes de fuego, en saltos y brumas, en partes recompuestas, en esperanzas vividas,
en trotes de amor
Y
atardecida en la calidez silenciosa de quien la mirA
.
Foto superpuesta: “Guillaume et Thomas”, de Phillippe Cognée. Gracias
También gracias al Museo Elysee por mostrarla y que la conociera
Lausanne, Switzerland